El periodista Esteban Mirol revela en una entrevista los detalles de su experiencia de abuso en la infancia, resaltando el apoyo familiar recibido.
Esteban Mirol comparte su testimonio sobre el abuso infantil sufrido
Cortesía de minuto1
La reciente intervención de Esteban Mirol en el programa de streaming Ángel Responde, presentado por Ángel De Brito, ha revelado un aspecto inexplorado de su biografía personal. En un ambiente de respeto y atención, el periodista optó por relatar un episodio profundamente traumático que vivió durante su infancia, específicamente a la edad de siete años. Este tema emergió a raíz de una consulta meticulosa por parte del conductor, lo que permitió un testimonio personal, el cual fue expuesto desde una perspectiva reflexiva y con la distancia que otorga el tiempo.
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A lo largo de la conversación, Mirol enfatizó que no se trata de una experiencia que haya divulgado ampliamente, aunque sí era conocida por su círculo más íntimo. “La familia ya lo sabía, algunos amigos no, y como siempre te preguntan por qué no lo contaste. Y porque no da. Me recuperé bien, hay gente a la que le cuesta más. A mí no, la mejor terapia fueron mis viejos. Me apoyaron”, subrayó, evidenciando el apoyo emocional que recibió y la función crucial de sus progenitores en su proceso de sanación.
En el desarrollo de su relato, el periodista puso especial énfasis en la respuesta de su familia al enterarse de lo sucedido, así como en la relevancia de haber contado con su apoyo desde el inicio. “Mis viejos me creyeron, lo sacaron a las patadas”, manifestó con firmeza. Además, hizo referencia a un reencuentro inesperado con su agresor años después, en una circunstancia cargada de simbolismo. “Después me encontré con ese hombre, fue al velatorio de mi padre. Pero ya está, ya fue”, concluyó, indicando que ha logrado superar esa etapa de su vida.
En ese contexto, Mirol proporcionó información que generó particular interés entre los espectadores: la edad del agresor en el momento de los hechos. Tal como explicó, se trataba de un individuo de “15 o 16 años”. Su relato fue desarrollado de manera serena y reflexiva, evitando recursos sensacionalistas, y centrando la atención en el proceso personal que le ha permitido transitar y resignificar su experiencia a lo largo del tiempo.
Durante la emisión, Ángel De Brito y el equipo del programa destacaron la serenidad y la sinceridad con las que el periodista decidió presentar una experiencia tan delicada. Este testimonio generó un impacto significativo en la audiencia, que reconoció el valor de compartir tales experiencias desde una perspectiva respetuosa, consciente y enfocada en la fortaleza individual.
