La Universidad de Brown activó protocolos de emergencia y ordenó el confinamiento tras un tiroteo en su campus, mientras fuerzas de seguridad locales, estatales y federales realizan un extenso operativo en busca del agresor.
Tiroteo en la Universidad de Brown: múltiples heridos y alerta elevada
Cortesía de diariopanorama
Un incidente de alta gravedad se produjo el pasado sábado en la Universidad de Brown, reconocida como una de las instituciones académicas más destacadas de Estados Unidos, a raíz de un tiroteo registrado en su campus. Este acontecimiento desató un amplio despliegue de fuerzas policiales y llevó a la universidad a implementar de manera urgente un confinamiento para alumnos, educadores y personal administrativo.
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La primera señal de alerta se emitió alrededor de las 17:00 horas (hora local), momento en el que la universidad comunicó la existencia de un “tirador activo” en las cercanías del edificio que alberga áreas fundamentales de la Escuela de Ingeniería y del Departamento de Física. A través de mensajes de emergencia, las autoridades académicas instaron a toda la comunidad a permanecer en refugio hasta nuevo aviso.
Simultáneamente, la Policía de Providence confirmó que varias personas habían sido impactadas por disparos en las proximidades del campus; sin embargo, no se ofreció información precisa acerca del número de heridos ni del estado de sus lesiones. La investigación está siendo llevada a cabo por múltiples agencias, mientras vehículos de patrullaje, ambulancias y unidades de bomberos se desplegaban en la zona afectada.
El suceso generó una notable confusión durante los primeros momentos de la crisis. En un comunicado inicial, la Universidad de Brown indicó que un sospechoso había sido detenido. No obstante, aproximadamente una hora después, la institución rectificó dicha afirmación y precisó que no había individuos bajo custodia, y que la policía seguía en la búsqueda del agresor o posibles cómplices.
La magnitud de este evento ha suscitado una serie de interrogantes tanto en la comunidad universitaria como en la opinión pública, lo que ha llevado a un llamativo interés mediático. La situación ha resaltado la importancia de mantener protocolos de seguridad robustos en instituciones educativas, así como la necesidad de una respuesta rápida y efectiva ante emergencias de esta naturaleza.
Finalmente, se ha instado a los estudiantes y al personal a permanecer alertas y seguir las indicaciones de las autoridades mientras se lleva a cabo la investigación correspondiente. Este tipo de incidentes pone de manifiesto la urgencia de abordar la problemática de la violencia armada en espacios académicos y la imperiosa necesidad de establecer medidas preventivas más efectivas.