Las recientes incursiones aéreas no autorizadas por parte de aviones de combate de EE.UU. intensifican la ya delicada relación entre ambos países.
Incursiones Aéreas de Cazas Estadounidenses en Espacio Aéreo Venezolano
Cortesía de elliberal
En un desarrollo reciente, reportes provenientes de plataformas de seguimiento aeronáutico indican que aviones de combate estadounidenses llevaron a cabo tres maniobras en un patrón cerrado y a baja altitud, durante las cuales activaron sus sistemas de radar de búsqueda. Estas aeronaves operaron bajo protocolos de enfrentamiento que les permitían una respuesta inmediata ante cualquier eventual amenaza potencial.
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Asimismo, se ha señalado que estas maniobras aéreas se llevaron a cabo en las cercanías del Lago de Maracaibo, un área geográfica que el Estado venezolano considera como aguas interiores, situadas al sur del paralelo de Castilletes.
Adicionalmente, según informes de La Patilla, se observó que un avión Growler activó su sistema de identificación automática en las proximidades del norte de Aruba. Posteriormente, dos cazas F-18 Super Hornet habrían cruzado a territorio venezolano, formando parte de las operaciones vinculadas al portaaviones USS Gerald R. Ford, reconocido como el más grande del mundo.
Por otro lado, horas antes de estas incursiones, se registró la presencia de un dron MQ-4C Triton que realizaba actividades de reconocimiento frente a las costas de la nación caribeña, lo que sugiere un incremento en la vigilancia militar en la región.
Los datos recopilados por Efecto Cocuyo indican que los aviones se acercaron a menos de 12 millas náuticas de la costa venezolana antes de desactivar sus transpondedores, constituyendo la aproximación más cercana de aeronaves militares de EE.UU. al territorio continental venezolano en varios años.
En respuesta a estas acciones, el gobierno venezolano, a través de su portavoz Jorge Rodríguez, emitió una severa advertencia, subrayando que el país está preparado para enfrentar cualquier intento de agresión por parte de Estados Unidos. Rodríguez enfatizó que, aunque Venezuela se considera un país pacífico, se tomarán las medidas necesarias para defender su soberanía, afirmando que “si una agresión osa entrar a territorio sagrado de Venezuela, o a nuestro cielo, mares o ríos sagrados, vamos a luchar”.
