La responsabilidad parental: un recurso legal en el fútbol argentino

Desde la implementación del nuevo Código Civil y Comercial de la Nación en 2015, el término “patria potestad” fue sustituido formalmente por el concepto de responsabilidad parental. A pesar de que en el uso cotidiano y mediático aún prevalece la denominación anterior, esta transformación representa un cambio significativo en la perspectiva jurídica respecto a los derechos y obligaciones de los progenitores en relación con sus hijos menores de edad.

En el contexto del fútbol argentino, esta figura ha cobrado una importancia notable en años recientes, particularmente en las disputas entre clubes y familias de futbolistas jóvenes con potencial profesional. La responsabilidad parental se define como el conjunto de derechos y deberes que pertenecen a los padres sobre la persona y los activos de sus hijos, con la finalidad de asegurar su protección, desarrollo integral y formación adecuada.

A diferencia de la anterior patria potestad, que implicaba una estructura de autoridad más vertical, el nuevo marco legal enfatiza el interés superior del niño y su autonomía progresiva, reconociendo la necesidad de que, a medida que crece, el menor sea escuchado y considerado en las decisiones que impactan su vida. El caso de Luca Scarlato en River ejemplifica esta problemática.

Responsabilidad parental como recurso para la movilidad de jóvenes futbolistas

En el ámbito deportivo, los progenitores frecuentemente invocan esta responsabilidad para justificar la transferencia de sus hijos a otro club, aun cuando la institución busque retener al jugador mediante regulaciones internas o requerimientos administrativos, como el pase libre. Desde el punto de vista jurídico, la decisión sobre el lugar donde un menor entrena, estudia o desarrolla su actividad deportiva es parte del derecho de los padres a definir su proyecto de vida, siempre y cuando no se vulneren los derechos fundamentales del niño.

No obstante, el conflicto surge cuando esta facultad entra en colisión con las normativas deportivas. En numerosas ocasiones, las entidades deportivas se oponen a la liberación del pase, justificando sus decisiones en las inversiones realizadas en la formación y desarrollo del futbolista. Ante tales negativas, las familias tienden a recurrir a la Justicia civil, generalmente a través de recursos de amparo, para hacer valer sus derechos y buscar una resolución favorable a sus intereses.

Esta dinámica ha generado un incremento en los litigios en el ámbito deportivo, lo que, por consiguiente, plantea interrogantes sobre el equilibrio entre la responsabilidad parental y el cumplimiento de las normativas establecidas por las instituciones deportivas. La necesidad de una interpretación adecuada y equilibrada de la legislación vigente es esencial para garantizar el respeto a los derechos de los jóvenes deportistas y el desarrollo ordenado del fútbol en Argentina.