Un sismo de magnitud 6.0 se registró frente a la costa de Chimbote, afectando también a Lima.
Un sismo de magnitud 6.0 se presentó en la noche del sábado en el norte de Perú, con su epicentro localizado en el océano Pacífico, frente a la costa del país. Este fenómeno geológico fue fuertemente sentido en Lima y con notable intensidad en Chimbote, una ciudad portuaria que se ubica a varios cientos de kilómetros al norte de la capital peruana.
El Instituto Geofísico del Perú (IGP) registró este evento sísmico e indicó que el temblor se produjo a las 21:51 horas, alcanzando una profundidad de 52 kilómetros, tal como reportó el medio local El Comercio. Este movimiento telúrico es parte de la actividad sísmica habitual en la región.
Según los datos oficiales, el epicentro se situó en el mar, a aproximadamente 67 kilómetros al oeste de Chimbote, una de las principales ciudades costeras del norte peruano. Este acontecimiento se desarrolló en una zona caracterizada por su alta actividad sísmica, resultado del contacto entre diferentes placas tectónicas.
En Chimbote, el sismo alcanzó una intensidad V en la escala de Mercalli Modificada, lo que indica un movimiento moderado, claramente perceptible por los habitantes tanto en interiores como en espacios abiertos. Este nivel de intensidad puede inducir vibraciones en puertas y ventanas, así como el desplazamiento de objetos menores.
Posteriormente al evento, se difundieron imágenes y videos en redes sociales que mostraron comercios con mercancía derribada, calles con diversos objetos diseminados y residentes que salieron de sus hogares para evaluar la situación y conversar con sus vecinos en distintos sectores de la zona afectada.
De acuerdo con lo reportado por El Comercio, el fenómeno tuvo un origen tectónico vinculado a un proceso de subducción, que implica que una de las placas de la corteza terrestre se desliza por debajo de otra, lo que provoca una liberación periódica de energía y, por ende, frecuentes eventos sísmicos en esta zona. Desde el IGP se enfatizó la importancia de mantener la calma durante estos eventos y seguir las recomendaciones de los organismos de emergencia, así como revisar el estado de las edificaciones una vez que se ha producido el movimiento para mitigar el impacto de futuros sismos.